17 Abr Las bases para lograr una buena autoestima
En esta publicación, queremos hablarte sobre cinco pilares que proporcionan una base firme para el bienestar emocional, el poder personal y una saludable autoestima.
1. Autoconocimiento. Es el primer paso hacia el autodescubrimiento y la realización personal. El autoconocimiento es fundamental para el crecimiento personal y el desarrollo emocional, y te permite establecer relaciones más auténticas y satisfactorias con los demás, al tener una comprensión más profunda de ti misma.
Se trata de explorar y comprender quién eres realmente, incluyendo tus valores, creencias, emociones, fortalezas, debilidades, deseos y motivaciones. Implica un profundo examen de ti misma, tanto a nivel consciente como subconsciente, para obtener una comprensión más clara de tu identidad y tu personalidad.
Requiere de un proceso de reflexión interna, autoevaluación, observación de tus acciones y reacciones que te ayudará a comprender cómo tus experiencias pasadas han moldeado tu forma de ser y cómo influyen en tus decisiones y comportamientos presentes.
2. Autoaceptación. Requiere una disposición a trabajar en tu crecimiento personal. Implica la valoración y el respeto por ti misma independientemente de tus logros o reveses en la vida.
Se trata de cultivar una actitud positiva y ser amable contigo misma, de establecer una comunicación abierta y respetuosa con cada una de tus diferentes partes internas y reconocer que cada parte de ti tiene una función positiva, aunque a veces pueda manifestarse de manera problemática. Todas las partes están tratando de protegerte de alguna manera, incluso si sus acciones pueden causar conflicto o sufrimiento.
La autoaceptación no significa autocomplacencia, sino que implica una reflexión y comprensión profunda de tu personalidad, compuesta por diferentes partes internas, ayudando a éstas a encontrar nuevas formas de interactuar entre sí de manera más armoniosa y cooperativa. Al integrar tus partes, puedes experimentar una mayor coherencia y autenticidad en tu vida.
3. Establecer límites saludables. Aprende a decir «no» cuando sea necesario y establece límites claros en tus relaciones personales y profesionales. Reconoce y respeta tus propias necesidades y no permitas ser tratada de manera irrespetuosa o abusiva.
Estos límites son necesarios para proteger tu bienestar emocional, físico y mental. Al establecer límites saludables, estás cuidando de ti misma y creando relaciones más equilibradas y satisfactorias con los demás.
Los límites saludables son claros y directos, respetan tanto tus propias necesidades como las de los demás, ya que es importante cuidar de ti misma sin dañar o faltar al respeto a los otros.
Para establecerlos, es fundamental tener una comprensión clara de tus propias necesidades, valores y límites personales. Esto requiere autoconciencia y autoaceptación, y también flexibilidad para hacer cambios cuando las circunstancias lo requieran.
Los límites saludables implican una comunicación abierta y honesta con los demás. Debes expresar tus necesidades y límites de manera clara y respetuosa, y estar dispuesta a escuchar y considerar las necesidades y límites de los demás.
4. Cuidado de ti misma. Prioriza tu bienestar físico, emocional y mental.
El bienestar físico incluye hacer ejercicio regularmente, alimentarte bien, dormir y descansar lo suficiente y dedicar tiempo a actividades que disfrutes.
El bienestar emocional requiere poder expresar tus emociones de forma adecuada, sin reprimirlas, buscando formas seguras y constructivas de expresarlas, ya sea a través de la escritura, el arte, la música, el baile o la conversación con alguien de confianza.
El bienestar emocional también incluye el aprender habilidades de afrontamiento del estrés como la respiración, la meditación, la visualización, el yoga o la atención plena, que te ayuden a manejar el estrés y regular emociones difíciles.
Cultivar relaciones saludables y de apoyo con amigos, familiares y otras personas significativas. Mantener conexiones sociales fuertes puede proporcionarte un sentido de pertenencia y apoyo emocional.
Para cuidar tu bienestar mental mantén tu mente activa con actividades que estimulen tu cerebro y te aporten aprendizajes de todo tipo.
Dedica tiempo a conocer y entender tus pensamientos, creencias y valores.
Organiza tu tiempo y establece prioridades para reducir el estrés y mejorar tu satisfacción personal.
5. Desafía tus pensamientos negativos y cambia los hábitos que dañan tu autoestima.
. Deja de compararte. Cuando te comparas se revela una profunda necesidad interior, así que date cuenta de en qué te fijas y mira a qué necesidad tuya está apuntando la comparación, y qué puedes hacer para atender esa necesidad tuya.
. Stop a la autodescalificación. Dialoga con tu voz crítica y exigente y hazle comprender que, aunque tenga la intención de protegerte, lo está haciendo de una forma equivocada.
. Basta de mirarte a ti misma como víctima. Cuando te colocas en el papel de víctima atribuyes a los demás o a la sociedad la culpa de tus males, te sientes impotente y evitas la responsabilidad de decidir y pasar a la acción.
. Deja de centrarte en tus errores. Para cambiar este filtro automático, puedes entrenar a tu cerebro buscando conscientemente en cada situación lo que has hecho bien.
. Transforma tu autoexigencia. Comprende qué hay detrás de tanta exigencia. ¿Qué necesidad pretendes satisfacer exigiéndote tanto? Empieza a hablarte con todo el respecto que mereces, aunque al principio te parezca forzado. Imagínate que se lo estás diciendo a alguien a quien quieres mucho y que sabes que merece lo mejor.
Tanto un terapeuta como un grupo de crecimiento personal pueden ser recursos valiosos en tu viaje hacia una saludable autoestima y desarrollo personal, aportando estrategias y herramientas para una exploración profunda y un mayor conocimiento y compresión de ti misma.
ENCARNA MARTINEZ Y ETHEL CABRERA
Facilitadoras del Programa Autoestima Integral
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